me gustas, pero mal (cont.)

Me gustas mal cuando te levantas cuando tienes sed
no me gustas bien
me gustas, pero mal, aunque me digas “no sé”.

Me gustas mal cuando te ríes de tus cuentos y de los míos
no me gustas bien
me gustas, pero mal, aunque cierres la ventana en la noche porque te da frío.

Me gustas mal cuando me dices que te encanta estar conmigo
no me gustas bien
me gustas, pero mal, por como te ves cuando caminas y cuando ves cómo te miro.

Me gustas mal cuando pienso en ti y no estoy contigo
no me gustas bien
me gustas, pero mal, porque no hago sino imaginarme en donde te consigo.

Me gustas mal cuando te digo que “así es que se habla ahora”
no me gustas bien
me gustas, pero mal cuando se me pasan demasiado rápido las horas.

Me gustas mal cuando nos encontramos a la gente en el ascensor
no me gustas bien
me gustas, pero mal, aunque todo el mundo se da cuenta de cuál es mi intención.

Me gustas mal porque conociste a Mecano, Charly García y Calamaro antes de que yo naciera
no me gustas bien
me gustas, pero mal, cuando pienso en que te quiero mucho más de la cuenta.

Me gustas, pero mal.